La localización de desaparecidos comparte técnicas de investigación con la localización de personas de forma rutinaria. No obstante, también se pueden aplicar otra serie de técnicas que en el otro caso no está permitido.
En este caso las localizaciones se llevan a cabo en personas que han desaparecido de forma repentina, sin comunicárselo a nadie cercano. Desgraciadamente es un servicio en el que abundan los menores como personas a localizar. Pero esto puede usarse a su favor. Sí el menor por ejemplo lleva consigo un teléfono móvil podremos realizar determinadas acciones que en otros casos no podríamos.
No obstante, hay que tener en cuenta que muchas desapariciones de mayores de edad se llevan a cabo de forma voluntaria. Por lo tanto, en caso positivo de ser hallados debemos tener en cuenta si el localizado nos da consentimiento para compartir su ubicación. Puedes consultar en qué casos es necesario el consentimiento en el artículo relativo a los Protocolos de actuación en localizaciones rutinarias de personas.
La actuación se basa en la misma realizada para las localizaciones comunes. Aunque con una diferencia notable. Debido a la urgencia de estos casos, usualmente se llevan a cabo por varios detectives privados a la vez. De esta forma, mientras uno lleva a cabo la ciberinvestigación, otros están realizando la investigación de forma física o presencial.
Geolocalización de desaparecidos basada en direcciones IP
La parte de ciberinvestigación se lleva a cabo igual que en una localización rutinaria. Un gran análisis de fuentes abiertas y posibles comunicaciones digitales (redes sociales). Pero en el caso de menores o de patologías mentales podemos realizar algunas técnicas más. Esto se debe a que podremos tener la autorización necesaria para solicitar información a los diferentes proveedores de servicios digitales a los que el desaparecido acceda o accediese. Por tanto, gracias a esto podremos intentar una geolocalización de su dirección IP por diferentes vías. Y es que no solo hay una única forma de obtener dicha dirección IP, sino que existen múltiples técnicas para obtenerlas.
Equipo multidisciplinar
Para que la localización de un desaparecido se lleve a cabo de forma efectiva hay que ponerse en marcha lo antes posible. Son fundamentales los primeros días. Pero además del tiempo, es importante que el equipo de investigación que lleve a cabo el servicio se trate de un equipo multidisciplinar. De esta forma, mientras un detective privado especializado se encarga de la ciberinvestigación en redes sociales, otro está geolocalizando. A su vez, otros detectives realizan la búsqueda de forma presencial en los entornos del desaparecido. Detectives que tengan formación en técnicas forenses, para poder distinguir o diferenciar posibles evidencias o rastros. También son fundamentales las habilidades sociales a la hora de obtener testimonios de terceros. Incluso, en muchos casos, es fundamental la percepción del lenguaje no verbal por parte del profesional. Pues en muchas desapariciones de menores, una persona del propio entorno del menor es quien le está dando cobijo.
En nuestro despacho contamos con detectives privados licenciados en biología, con alta formación en ciberinvestigación y lenguaje no verbal. Un despacho que ofrece un auténtico equipo multidisciplinar y formado en la localización de desaparecidos.
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